Te he hablado de cambiar eso y te he entregado herramientas para comenzar a practicar el delicioso arte de dejar ir lo que pesa, lo que duele, lo que ya no funciona para ti.  Este día quiero hablarte de la COMPRENSIÓN de ti mismo y de tu historia.

Mirar la historia de tu familia, saber sus orígenes, de dónde vienes y las formas de vidas que les tocó a tus antepasados, pero desde un rol de solo OBSERVADOR sin juicios ni opiniones, te regalará una valiosa joya llamada LIBERTAD. Ya sabes que somos el resultado de los programas que nos han sido inculcados desde pequeños. ¿Crees que tus padres, abuelos, bisabuelos o aún los ancestros de ellos tenían la información y herramientas para haberlo hecho diferente? Tú las tienes hoy o por lo menos unas cuantas y aún continúas eligiendo de manera inconsciente repetir las mismas acciones. Muchas veces ni siquiera son cosas que quieres hacer, pero sigues haciéndolas como un buen cordero, siguiendo a tu clan.

Entrar en el espacio de la COMPRENSIÓN no justifica una violación, un asesinato o cualquier crimen, pero si te regala la oportunidad de salir de tu rol de “pobrecito yo” y aceptar que “el verdugo” no actuaba en contra de nadie porque simplemente respondía a su programación y no te lo hacía a ti, ni a otro, se lo hacía a sí mismo. Llegar aquí, te dará una perspectiva de la vida totalmente diferente y podría activar algo que en esta realidad se llama PERDÓN, que no es más que ese lugar de la consciencia en donde los recuerdos ya no duelen, solo son cicatrices que te contribuyen a elegir una vida distinta para ti y tu descendencia.

Comprender te libera.