Todo lo que recibe atención, crece. Si estás pensando en lo mal que te ha ido últimamente o en la interminable lista de cosas que has estado aplazando, tu vibración bajará y tu tortura mental aumentará, lo que indiscutiblemente generará como resultado MÁS DE LO MISMO.
Usa a tu mente lógica para dirigir tus pensamientos. Enfoca tu energía en cosas, personas, situaciones o lugares que te inspiren. Y no me digas que no puedes porque los pensamientos llegan sin que tú puedas detenerlos, la mente NO SE MANDA sola. Además no te pido que los rechaces, lo que sugiero es que los dejes pasar y que coloques tu energía en lo que te suma.
Al no darle alimento a tus viejos patrones de sufrimiento y calamidad, desaparecerán por inanición y tu realidad se mostrará diferente. Esa es una de mis fórmulas favoritas para SOLTAR. No lucho contra mi mente, la pongo a trabajar para mí.
¿Cómo haces cuando las viejas malas costumbres de pensamientos se asoman? Prueba con:
- Ignora y redirige: Ignorarlos, no les des tu atención. Puedes hacer una pregunta como: ¿Qué otras posibilidades existen que no estoy considerando? ¿Qué cosas están disponibles ahora para mí?
- Visualiza: Crea o diseña una escena hermosa de algo que te guste mucho y tráela a tu mente para reemplazar al intruso. La mente es atemporal y no distingue si eso que en ese momento estás eligiendo pensar, es real o virtual, así que tu cuerpo responderá en automático liberando las hormonas de la felicidad.
- Enfoca tu energía en lo que quieres: Rodéate de gente que te inspire. Adiós a los tóxicos. No importa su vínculo contigo, es hora que te alejes de ellos, por lo menos mentalmente, hasta que hayas dominado la técnica. Es preferible no tener contacto con ellos, pero me queda claro que no siempre es posible, así que con que no les prestes atención bastará para empezar. No contestes, no quieras tener la razón, no la necesitas. Enfoca tu energía en lo que quieres y no en lo que rechazas.
